Sale a la luz el expediente del caso de discriminación racial presentado contra el presidente de Estados Unidos y su padre hace casi 40 años. Se resolvió con un acuerdo sin admitir responsabilidades.
Para alquilar uno de los apartamentos que Fred Trump promovía en Staten Island, uno de los cinco grandes distritos de Nueva York, había que ganar al mes cuatro veces lo que valía la renta. Era 1973, el piso más barato costaba unos 160 dólares, y pedir un certificado de ingresos resultaba -y resulta- una forma de cribar a inquilinos de menor solvencia. Pero, según la versión de uno de los empleados del viejo Trump, si la familia o individuo interesado era negro, las cosas se ponían más cuesta arriba: "Al final de mis dos semanas en Tysen Park, Fred Trump me dijo que no alquilara a negros. También quería que me librara de los que había en el edificio diciéndoles que había viviendas baratas disponibles para ellos", declaró un exempleado, que había sido despedido a las pocas semanas de trabajar con el constructor.
Para más información, acuda a: http://internacional.elpais.com/internacional/2017/02/16/estados_unidos/1487256396_855381.html
Realizado por: Adrián Jiménez
me ha gustado mucho
ResponderEliminar